Trabajadores del juego de Castilla la Mancha y Madrid exponen su situación
Trabajadores del sector del juego de las comunidades de Castilla La Mancha y Madrid han manifestado en estos días su malestar en relación con las políticas llevadas a cabo por parte de los gobernantes castellano manchegos y dirigentes de Podemos de la capital, respectivamente, en relación con el trato ofrecido a nuestro sector.
En el primer caso, el portavoz de de la Asociación de Trabajadores del Juego de Castilla-La Mancha, ATJUCALM, Juan Manuel López Moreno, ha mostrado su “malestar” y “preocupación” por el contenido del anteproyecto de Ley de Régimen Administrativo y Fiscal del Juego en Castilla-La Mancha que prohíbe a los establecimientos de juego estar situados a menos de 150 metros entre sí y a menos de 300 metros de los accesos de los centros oficiales de enseñanza reglada. Esta medida provocará que más de 700 trabajadores se vayan al paro cuando las licencias de los locales que no cumplan con esta medida dejen de estar en vigor. Por ese motivo, piden al Gobierno regional que cualquier reforma del sector del juego se realice «con el consenso y el diálogo con el sector y en concreto con los trabajadores».
En el caso de Madrid, el portavoz de la asociación de trabajadores del juego de la Comunidad de Madrid, ATJUCAM, Iñaki Angulo, ha acusado hoy a Pablo Iglesias de querer “condenarlos a las colas del hambre” , respondiendo al anuncio de del portavoz de Podemos, Pablo Echenique, que hoy ha señalado que presentarán enmiendas al decreto de ayudas para las empresas que han sufrido pérdidas como consecuencia de la pandemia del Covid 19 “para excluir expresamente a los salones de juego” a los que ha calificado de “sectores parasitarios que destruyen la economía de las familias trabajadoras y de los barrios”.
Los trabajadores del juego de Madrid van a iniciar una serie de acciones contra esta decisión del partido de Iglesias y no descartan acudir al Defensor del Pueblo para denunciar la “exclusión y marginación” a las que les quiere someter Podemos.